1. Sin riesgo de lesiones El spinning es una de las prácticas deportivas que menos riesgo de lesión tiene al ser un ejercicio de bajo impacto. Las articulaciones y la espalda no sufren durante los entrenamientos, por lo que prácticamente cualquier persona puede hacer spinning. 2. Ayuda a combatir el estrés Al ser un ejercicio de alta intensidad y con un gran trabajo cardiovascular ayuda a eliminar la tensión acumulada. Por ello, el spinning es una de las mejores prácticas que se pueden realizar tras una larga jornada laboral al liberar el estrés mientras se pedalea enérgicamente. 3. Tonifica tu cuerpo El spinning es una de los entrenamientos preferidos para tonificar varias zonas corporales. La alta intensidad de cada sesión permite el fortalecimiento de piernas y glúteos al ser las zonas que más rendimiento alcanzan. No solo se entrena el tren inferior, sino que ayuda a definir otras zonas del cuerpo como los abdominales en determinados puntos de la sesión, sobre todo en la realización de inclinamientos.